Toro, Monte la Reina y la estepa

La comarca Alfoz de Toro la tenemos algo olvidada, no porque no nos guste, sino porque está a una distancia de Zamora que si haces un recorrido de ida y vuelta desde la capital se va de kilómetros. Por ello hoy nos hemos desplazado con coches hasta las cercanías de Toro y hemos salido desde allí para así poder recorrer una buena parte de ella. 

Como de Toro nos separan unos 40 km por carretera, salimos de Zamora tres bikers en dos coches a las 9.30 h. Nos acompañó un cuarto biker, pero sin bici, por tener una pequeña lesión. Sobre las 10.00 llegamos al Área de Servicio Toro, donde aparcamos los coches. Bajamos las bicis, nos preparamos y tomamos un café antes de salir. 

Iniciamos nuestra ruta allí porque hay sitio para aparcar y está muy cerca de Toro. Comenzamos a pedalear a las 10.15 h. A esa misma hora el cuarto biker inició su paseo. En el cielo había nubes y claros y la temperatura era muy agradable, 14 grados.

Rodeamos el área de servicio y seguimos por un camino en el que en varios tramos había viñas muy viejas ya desprovistas de sus frutos. 

Como dos kilómetros y medio más adelante entramos en la ciudad de Toro por la carretera ZA-706. Al llegar a la rotonda cruzamos y pasamos bajo la bonita Puerta de Corredera, construida en 1602 con fines decorativos y en honor a Felipe III. Se asemeja a los arcos triunfales de la Roma Imperial.

Seguimos la calle adelante hasta llegar a la plaza del Mercado. Pasamos bajo el Arco del Reloj y continuamos sin variar nuestra dirección. Frente a nosotros ya podíamos admirar la grandiosa Colegiata, de estilo románico-gótico. Se comenzó a construir en el último tercio del siglo XII (alrededor de 1170), en tiempos del reinado de Fernando II de León, y se terminó bien entrado el XIII.

Desde allí continuamos hacia la derecha y seguimos callejeando prácticamente siguiendo una línea recta hasta salir a una rotonda de la N-122, justo a la entrada de la ciudad. En dicha rotonda optamos por ir hacia la derecha hasta otra rotonda que está muy cerca. Allí nos desviamos hacia la izquierda, incorporándonos al carril bici que hay en la carretera del cementerio. 

Cuando se terminó el carril bici continuamos por el camino asfaltado que seguía hacia adelante un kilómetro más, aproximadamente.

Nos desviamos ligeramente a la izquierda y comenzamos a descender. La verdad es que así da gusto empezar, llaneando y bajando... Ya en esa primera bajada nos encontramos alguna zona con pinos, antesala de lo que vendría después. 

Antes de terminar la bajada el asfalto dio paso a un camino y por él seguimos descendiendo hasta llegar a una vaguada donde desapareció el arbolado. Terminada esta continuamos por un camino entre pinos, era el comienzo de Monte La Reina y el comienzo de un largo ascenso. 

Este camino nos llevó hasta otro más ancho de piedra compactada al que nos unimos a la izquierda y por el que recorrimos unos cuatro kilómetros sin prácticamente dejar de subir, algo esperable después del descenso del principio. 

De vez en cuando aparecía alguna bajada que nos daba una tregua, pero siempre le seguía una subida mayor que lo descendido.

Un desvío hacia la izquierda nos sumergió en un caminito estrecho y sinuoso, flanqueado por pinos, alguna encina y jaras, muchas jaras. 

Este tramo fue cortito, como medio kilómetro, pero nos condujo a un camino de mayor entidad que tomamos hacia la izquierda, si bien enseguida giramos al lado contrario. 

Por el nuevo camino rodamos como dos kilómetros, ya con tendencia descendente y aún adentrados en el pinar de Monte la Reina. Tras esa distancia los pinos se terminaron bruscamente y giramos noventa grados a la izquierda. Allí mismo nos encontramos con una cancela pero una de sus dos hojas estaba abierta de par en par. En un cartel rezaba Ministerio de Defensa. Prohibido el paso. Como en 1997 cesó la actividad del Campamento Militar de Monte la Reina, cruzamos la cancela. 

En ese punto comenzamos otra ruta diferente, que nada tenía que ver con la anterior, porque comenzamos a recorrer un claro ejemplo de la estepa cerealista castellana. Descendimos primero hacia una nave en la que había grano almacenado.

Tras dejar a nuestra izquierda esas instalaciones agrícolas, comenzamos una subida que se prolongó a lo largo de unos cuatro kilómetros, si bien en algún tramo hubo pequeñas bajadas. 

Terminado el ascenso comenzamos a vivir, mejor dicho, a rodar de las rentas y enseguida llegamos a otra cancela, en esta caso de salida, que también tenía una parte abierta. 

Poco más adelante nos enfrentamos a la autovía A-11. Giramos a la izquierda y cruzamos bajo ella por un túnel. 

Al salir de este había una bifurcación en la que seguimos por la izquierda, iniciando así una recta de un kilómetro que nos llevó hasta Matilla la Seca. 

Entramos en el pueblo y nos dio la sensación de estar abandonado porque no conseguimos ver ni a una sola persona en nuestro recorrido por él. Un claro ejemplo de la España vaciada.

Pasamos junto a la iglesia, que es una amalgama añadidos que le quitan cualquier encanto. 

Según salimos de la localidad enfilamos una inmensa recta rodeada de campos de cereales y con tendencia ascendente. 

A lo lejos divisamos lo que parecía una iglesia con su torre y pensamos que sería Fuentesecas, pero al aproximarnos nos dimos cuenta de que eran pacas de paja apiladas. Que Santa Cecilia nos siga conservando estas vistas de linces. 

La recta continuó después de pasar cerca de la "iglesia" y aún no veíamos ni rastro de la localidad de Fuentesecas. 

Después de cinco kilómetros de recta y suave ascenso comenzamos a descender y entonces sí, ya pudimos divisar la imponente figura de la iglesia de San Esteban. Imponente por su situación, en un promontorio con el pueblo a sus pies, y por su tamaño. 

Fue construida en el siglo XVI y se erigió sobre un templo románico anterior. Por su ubicación fue usada como observatorio meteorológico en el siglo XIX. 

Después de dar la vuelta al templo descendimos hacia el propio pueblo. Recorrimos algunas de sus calles y lo abandonamos saliendo hacia la derecha. 

Nada más dejar atrás esta localidad nos topamos con otra gran recta, esta de unos cuatro kilómetros, y tendencia descendente, aunque esto no nos privó de alguna pequeña subida. En un momento dado nos paramos para hacernos una foto con ese fondo tan propio de Castilla. 

Después de los cuatro kilómetros, tras coronar una pequeña subida, pudimos ver la siguiente localidad de paso, Abezames. 

Descendimos hacia el pueblo y recorrimos una calle que nos llevó hasta la iglesia y la plaza. 

Esta iglesia, de San Miguel Arcángel, también es del siglo XVI. Aunque en esta ocasión no nos acercamos, en el pueblo también se encuentran las ruinas de la antigua iglesia de San Salvador. Abezames, en su momento, vivió momentos mejores porque llegó a contar con dos parroquias, otras dos ermitas e incluso un hospital para peregrinos.

En la plaza llamó nuestra atención una casa decorada con llamativos colores. 

Salimos de esta localidad por la carretera de Pozoantiguo, pero enseguida nos desviamos a la derecha para continuar por un camino trazado en paralelo a dicha carretera. 

La tendencia del camino volvía a ser la misma que el que nos llevó hasta Abezames, ligeramente descendente con algunas subiditas cortas. 

Después de poco más de tres kilómetros entramos en Pozoantiguo, pasamos junto a la iglesia de San Juan Bautista, de los siglos XV y XVI, también de generosas dimensiones y que sufrió un incendio en 1940. En 1951 fue reconstruida. 

.

En nuestro recorrido por el pueblo, al pasar por una plaza vimos un grupo de gente que llamó nuestra atención. Nos acercamos y pudimos comprobar que Javier Pérez Andrés estaba conversando con un lugareño grabando un programa de El Arcón pera la televisión de Castilla y León. 

. 

Más adelante pasamos junto a un edificio emblemático de la localidad, el Grupo Escolar, construido en 1917 por iniciativa de  civiles destaca el Grupo Escolar (1917) levantado por iniciativa de D. Ismael Calvo Madroño, Consejero de Instrucción Pública y Senador del Reino, nacido en Pozoantiguo.

Continuamos recorriendo esta localidad, que es grande, y la dejamos atrás después de cruzar la carretera que la une con Toro. Nosotros seguimos de frente por un camino repleto de pequeños sube y bajas en un paisaje similar al de todo el recorrido, excepto el tramo de Monte la Reina. 

Tras recorrer unos cinco kilómetros llegamos a la siguiente localidad de nuestro periplo por el Alfoz de Toro, Villardondiego. Nos recibió su iglesia con una altísima torre y una nave construida justo delante :(

Realizamos el pertinente itinerario por el pueblo, que nos llevó a pasar por la plaza, donde se encuentra el Ayuntamiento. 

Dejamos atrás el pueblo por un camino, aunque poco más adelante nos llevó hasta la carretera que va hacia Toro. Seguimos por ella unos cientos de metros y la abandonamos girando a la izquierda. De nuevo volvieron a aparecer sube y bajas, enlazando con una subida de mayor importancia. 

Culminada esta comenzamos a descender. Más adelante cambiamos de dirección, siguiendo hacia la derecha. Cruzamos la misma carretera y continuamos de frente. Un kilómetro después giramos a la izquierda y seguimos por una estupenda pista que, más adelante, nos permitió pasar por encima de la A-11 a través de un viaducto. 

Como otro kilómetro más adelante entramos en Tagarabuena. Seguimos por la misma calle por la que accedimos al pueblo hasta llegar a la iglesia. 

Este templo, de San Juan Bautista, del siglo XVI, está considerado como uno de los más completos de la comarca de Toro. 

Una vez hecha la foto de la iglesia seguimos por la localidad. Cambiamos ligeramente nuestro itinerario por unas obras pero salimos de él enseguida. Seguimos por un camino que nos llevó a otro más importante y poco después giramos a la derecha. Como quinientos metros después cruzamos la carretera que une la A-11 con Toro y entramos en el Área de Servicio Toro, poniendo así el punto y final a nuestro recorrido. 

Bueno, el verdadero punto y final, fue en la Bodega Latarce, donde comimos en un ambiente muy, pero que muy agradable. 

Para descargar la ruta haz clic en el logo de Wikiloc.

Powered by Wikiloc