Pero para llegar a estas ruinas tuvimos que hacer antes un trecho. Salimos de la Ciudad Deportiva ocho bikers, que podían haber sido diez si no hubiera sido porque a última hora fallaron dos.
Salimos de Zamora por el Espíritu Santo y por el barrio de San Isidro.
Ya en lo alto de San Isidro, cruzamos la N-122 y continuamos con dirección a Palomares, pero antes de llegar cogimos un camino que ha estado mucho tiempo cerrado y que se ha abierto por orden judicial gracias a la constancia y buen hacer de Bicizamora.
Desde Palomares fuimos hacia Valdeperdices, pero no llegamos al pueblo, sólo hasta la entrada, desde allí ascendimos hacia la carretera que va a El Campillo.
Por ella rodamos rápido hasta llegar a la iglesia visigótica de San Pedro de la Nave.
Desde allí continuamos por un camino que nos llevó hasta otro que desciende hasta la misma orilla del embalse. Desde allí ya pudimos contemplar los restos de lo que fue San Pedro de la Nave.
Impone ver lo que un día fue un pueblo, y que hoy no es más que restos de paredes de piedra. No pudimos por menos que ponernos en la piel de todos aquellos que tuvieron que abandonarlo todo para que Iberdrola obtuviera beneficios.
Tras pasear por las ruinas y comer algo, iniciamos la ascensión. Hubo una parte que sólo los más fuertes lograran superarla sin bajar de la bici.
Enseguida llegamos de nuevo a El Campillo y desde allí nos desviamos a la derecha para tomar un bonito camino que va bordeando el embalse. Después tuvimos que realizar una gran ascensión con dirección hacia Muelas.
Ya cerca de Muelas cambiamos de dirección para volver hacia Palomares.
Y ya desde Palomares regresamos a Zamora volviendo a entrar por San Isidro, pero descendimos hacia Valorio donde nos hidratamos y enseguida volvimos a nuestras bicis para finalizar la etapa.
Para descargar la ruta haz clic en el logo de Wikiloc