Después de la bonita ruta del Domingo pasado por tierras de Sayago, hoy martes festivo, la idea era hacer una suave, no muy larga, cómoda... de las llamadas "de trámite", porque además nos acompañaba una nueva incorporación al grupo y un jovenzuelo apasionado de la bici, pero aún sin la forma física necesaria para una jornada de muchos kilómetros.
Nadie habría dicho que, tras las lluvias de anoche, iba a amanecer una mañana así de espléndida. Cierto es que la previsión meteorológica nos lo había anunciado, pero tanto cambio en tan pocas horas no nos lo terminábamos de creer.